En los últimos días, quienes se han dado golpes bajos son los políticos Graco Ramírez, ex gobernador de Morelos y el gobernador de esta entidad, Cuauthémoc Blanco, quienes se acusan como los peores pero también se defienden como los mejores.
Mientras el ex funcionario reapereció en medios de comunicación para defender su administración estatal debido a que el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, tuvo que defender al exfutbolista, pese a los malos resultados de su gobierno de acuerdo a cifras oficiales de la misma autoridad federal, Graco Ramírez consideró que el actual gobernador es una persona frívola y ausente.
Con otro golpeteo verbal, Cuauthémoc Blanco le respondió a Graco que está dolido por haber vencido a su pariente en las elecciones.
Lo cierto es que no hay ni a quién irle por la cola que traen ambos y que se pisan una y otra vez con acusaciones de corrupción, enriquecimiento ilícito, pactos con el crimen, entre otros temas que lo único que es evidente, es la situación que enfrentan los morelenses día con día, sobre todo en el tema de la seguridad.