En Sinaloa y en el país entero, hay un desabasto de fertilizantes, que nos concierne a todos, ya que de eso depende que una nación cuente con el alimento suficiente.
GPO, filial de la empresa alemana PROMAN, es la primera empresa que cuenta con el consenso de la población de la zona de impacto de la planta de fertilizantes.
En este fin de semana se está dando la etapa consultiva y de acuerdos de la primera consulta indigena a los mayos yoremes de la zona, quienes han sido muy participativos en la primeras etapas informativas. Saben que tienen en sus manos el poder de desarrollar sustentablemente sus comunidades y a la vez preservar sus tradiciones.
Sin embargo, hay un personaje que ha manipulado a los mayos desde hace años, Felipe Montaño, quien con sus oscuros intereses, que habrán de ser investigados, está dañando a sus propios hermanos yoremes, pero además a los millones de sinaloenses y de mexicanos, especialmente a productores agrícolas y por lo tanto a los consumidores, ya que ha hecho de todo para evitar que el progreso llegue a Ahome.
Felipe Montaño, con una cortina falsa ambientalista, ha coptado y amenazada a sus vecinos de Ohuira y Lázaro Cárdenas, además que ha querido arrebatarle a sus hermanos yoremes, el derecho de ser consultados, solo porque dice que no les corresponde, aún cuando la SCJN ordenó que sean consultados en un radio de 45 kms de la zona de impacto.
La garantía de los procesos participativos es que la mayoría gana, a pesar de los intereses de unos cuantos, así que con la voluntad de la mayoría mayo, se podrá incluir el desarrollo a estas comunidades
